El agua hidrogenada es antioxidante y previene la acidificación al evitar la oxidación, con la ventaja de tener un pH de 7 a 7.5, muy similar al de la sangre y una mineralización débil, lo que permite sumar a los beneficios del agua "alcalinizante" los beneficios del agua ligera.
NO ES LO MISMO agua hidrogenada que "agua alcalina". Esta última tiene mineralización alta y pH superior a 8.5 y aunque podría ayudar a neutralizar los ácidos en nuestro cuerpo, no combate la principal causa de ellos, que es la oxidación, con el perjuicio de que los minerales presentes en el agua son inorgánicos y un exceso de éstos no es recomendable a largo plazo.